¿Qué es mindfulness o atención plena?

Observar la realidad tal como es

Mindfulness  es la actitud de prestar atención a los acontecimientos de la vida de forma especial.

¿Y qué tiene de especial? Pues que la atención está en el momento presente con aceptación e interés en lo que está sucediendo.

Según la definición del Dr. Jon Kabat-Zinn es «la conciencia que surge al prestar atención de forma intencionada, al momento presente, aquí y ahora, sin realizar juicios al respecto «.

La atención plena es la habilidad de entrenar la atención hacia uno mismo, hacia los demás y hacia el entorno. Prestando atención a lo que ocurre en cada momento, en cada instante de la vida, aquí y ahora.

Piloto automático

Mente y cuerpo están en lugares diferentes

¿Cuál es la actitud contraria a la atención plena? el piloto automático, desconectar de la experiencia presente,  vivimos con un continuo “diálogo interno”, mantenemos una charla con nosotros mismos pensando en sucesos del pasado o del futuro

Estar en el presente es excepcional, + 50% del tiempo la mente está en un lugar diferente de dónde está el cuerpo. La felicidad se encuentra dónde está la mente, no dónde está el cuerpo.

Nuestra manera de vivir con la “mente errante, atrapados en un funcionamiento que nos lleva a temer el futuro-ansiedad- y dar vueltas al pasado-rumiación-, disminuye nuestro contacto con el presente y reduce nuestra calidad de vida.

PARA QUÉ

¿Para qué vivir plenamente?

Para poder acceder a la experiencia del momento presente, parando y observando las cosas tal y como son, con curiosidad y con una actitud abierta y amable, viviendo la vida en lugar de pensando la vida

¿Cuáles son los beneficios de la práctica de la atención plena?

Permite ser más consciente de tus necesidades físicas y emocionales.

Permite aprender a relajar el cuerpo y reducir la actividad mental.

Permite mejorar tu nivel de atención y concentración, facilitando ser más eficaz, reducir el estrés y desarrollar una mayor sensación de bienestar.

Permite cultivar la claridad y la comprensión, identificando distintas percepciones de la realidad, para poder ser más proactivos en vez de reactivos.

Permite tomar conciencia de tus pensamientos, juicios y opiniones en los que estás atrapado y facilita experimentar la vida con menos filtros.

Permite aprender a tomar pausas antes de responder, para no reaccionar de manera inmediata ante situaciones difíciles.

Permite tener mayor conciencia de las emociones de los demás, facilitando las relaciones personales y reduciendo la probabilidad de conflictos interpersonales.

Permite practicar la comunicación asertiva y la escucha activa.

Permite mejorar la organización y la gestión del tiempo, asignando prioridades de forma consciente.